Se imaginaba de mil maneras la forma en que el llegaba y declaraba su amor, una que constantemente se aparecía de la nada en su cabeza era la de estar en su casa, sentada frente al ordenador cuando de pronto se escucha el timbre y ella abre… la feliz afortunada lo ve con cara sospechosa, y analiza el lenguaje corporal de su amigo, de quien secretamente está enamorada, lo nota nervioso y se pregunta qué rayos puede hacer en su casa a alguna hora tarde de la noche, y por tarde me refiero después de las 9:30 pm. Y es entonces que el comienza a hablar, diciendo su nombre y alguna que otra incoherencia que ella es incapaz de entender, hasta que le pide a su compañero que hable más fuerte porque la verdad no sabe ni que rollo; lo invita a pasar dentro pero él se niega diciendo que tiene que irse pronto, que solo vino a decirle algo y es en ese preciso momento que el la voltea a ver tiernamente a los ojos y con una voz seria, temblorosa, le declara su amor y pide el honor de ser novio de ella; por supuesto que encantada ella va a aceptar y entonces un abrazo intenso se darán, se reirán por unos instantes y entonces el celular de su ahora novio sonará, es su madre quien le pide que ya se regrese, él obedientemente se va con una sonrisa y un pequeño beso de pico en los labios, nada apasionado, pues ambos siguen en shock, tan pronto el se va ella se desplomara en el suelo, se quedará ahí por una buena media hora, que es entonces cuando su papá llegará del trabajo y le preguntara que paso, ella feliz de la vida contestará que todos sus sueños se han hecho realidad y entonces se levantara con gracia, con su mente un poco en las nubes pero el resto firmemente en el suelo, y es entonces que apagará su computadora, olvidando por completo lo que estaba haciendo, y se ira a su cuarto a soñar con la nueva vida que tiene, y cuestionándose como la recibirá él mañana.
